Ori

Ori (2017 m) cresta de Alüpiña. Iraty, Pirineos

Esta salida acontece por el plan de Ag. de adecuarse a la alta montaña, de practicar técnicas propias de la misma como el cramponaje, y de estrenar material. Es un caso, el de Ag., parecido al mío en ciertos aspectos, pero en fase aguda. Le gusta extremadamente la montaña, la literatura montañera y viajera, los datos, historias y personajes. Adora comprar el mejor material posible. En el monte, sin embargo, en cuanto hay alguna pequeña dificultad, es, de momento, negado (es sin duda un problema de cabeza, que a mí también me afectaba, y me sigue afectando, pero menos cada vez). No consigue realizar ningún proyecto completo (Petit Vignemale, Bisaurin, Lenito, Castillo de Acher, Ori). A. se anima, cosa que hasta parece rara ya, y los cuatro salimos de madrugón ala estacion de esquí de ondo de Irati, en el Pto. de Bagargiak, en la carretera D.Garazi-Larrañe.

“...este itinerario, el más utilizado (sic), no es por ello el más fácil; las personas impresionables
podrán elegir la siguiente ruta, por la vertiente Oeste.” [M. Angulo, Guía del Pirineo Vasco]

quien Alberto, Ag., Ai. y yo.
tiempo 7h30.
meteo Buen tiempo, poco frío y poco viento en la cresta.
base St. ski Iraty (1300 m).

routenote 

Por la pista de ski de fondo llegar a las laderas de la travesía zona Odeizügaña. Nos situamos así sobre Ibarrondoa, tomando pie en la base de la cara NO del Zazpigaña (preciosa la modesta Cara Norte). La superamos por pendiente continuada (crampones), y cruzamos en lo alto la arista, preciosa, del Zazpigaña (1765m). 

Es en el pequeño descenso a la brecha (I) donde Iñaki se queda bloquedo, la pena es que Alberto se queda con él, como fiel guía. Aiert y yo remontamos hasta el colladito de salida de la comba de Alüpiña. La cresta hasta cima se remontarla fácilmente. El uso de crampones, con la nieve venteada, es habitual. 

El descenso es por el mismo itinerario.

La salida se desarrolla muy relajadamente, hablando mucho mientras nos acercamos al Zazpigaña. Antes de llegar al mismo paramos para comer. Alberto, contento de tener el sábado libre, degusta bocados de delikatessen. Sin embargo, llega el “momento Boris”, y el grupo se separa en la brecha de Alupiña, donde a Iñaki le da la paranoia.

Aiert y yo seguimos, remontando rápidamente la cresta NO del Ori, y dando caza a un grupo de esquiadores franceses, poco antes de la cima. Una breve mirada a las montañas que se van elevando hacia el Este, y para abajo a reencontrarnos con nuestros compañeros.

Tras un breve flanqueo con crampones en el descenso del Zazpigaña, que nos evita mucha pérdida de tiempo y caídas tontas, nos reunimos con ellos poco antes de la larga travesía para enlazar con la pista de fondo.

La estación está bastante concurrida, con gente jugando en la nieve y pululando gracias al buen día. Mientras las nubes se van acercando, tal y como predijo la meteo, nos cambiamos, y una vez todos sequitos, volvemos a Donosti.

A pesar del cansacio lógico, y como, sea dicho de paso, me he encontrado bastante bien físicamente y tenía que lucir mi enrojecimiento facial gracias a no llevar ni gafas ni crema solar, he salido a dar una vuelta con Beatriz, Camino y Raquel. Renzo también estaba. Estamos un buen rato en el Ondarra, buena onda carnavalera, y luego otro pote en el Ensanche.

Donostia, abril de 2004