domingo, 24 de febrero de 2008

Montaigu



Pic de Montaigu (2339 m) normal Lesponne. Macizo Midi de Bigorre, Pirineos

24.02.08. "Ascensión relámpago a este pico ayer. Tras ciertas dudas al comprobar en la meteo que el anticiclon iba tocando a su fin, y que a la tarde podrían entrar las lluvias, al final me decidí a salir, sabiendo que durante la mañana al menos, el tiempo iba a aguantar, estando el Sol tapado por una capa fina de nubes altas. Tras partir a las 04:20 horas, salgo por la salida 12 de la A68 a la altura de Tarbes, para coger dirección Bagneres de Bigorré, pasado este, a la altura del pueblo de Beaudéan, se abandona la carretera que va a La Mongie, y se dobla a la derecha para adentrarse en el valle de Lesponne. 

Tras pasar el pueblo de Lesponne, tres kilómetros mas adelante sale una pista asfaltada a mano derecha, con una indicación al “Courtaou du Hourc” y en amarillo una indicación al “Montaigú”. Se sube la pista asfaltada unos tres kilómetros, con un último tramo de piedras pero transitable sin machacar en exceso el coche, hasta otros indicadores para subir al Montaigú (ya andando) por dos opciones diferentes. Me sorprende lo corto del viaje, a las 07:00 en punto me encuentro ya aparcado, pensando q por estar el monte situado muy al norte, el trayecto es menor. Total que está bastante oscuro, así que comienzo los preparativos con mucha tranquilidad para ver si va adentrando algo más de claridad.

A las 07:20 comienzo a andar, con algo de claridad, a través de una pista entre bosque que tiene una bonita pendiente. Enseguida se abandona, (siempre siguiendo las marcas amarillas), y ya el camino transita por sendas más estrechas entre bosque, alternándose con un par de zonas despejadas en forma de campas. A continuación el camino va mas que pegado, metido dentro del cauce de un río, y salen bastantes cachos con hielo durísimo, así que hay q extremar precauciones, ya salidos de la zona del río, se alcanza un plateau, ya todo nevado, en el que se divisa en lo alto el Col de Tos. Tras subir la pendiente la pala nevada, alcanzo dicho collado, sorprendiéndome gratamente con las vistas de la otra vertiente. 

Lo primero q llama mi atención son los Gabizos, sobre todo lo bien formada que se ve la Este del Petit, la cual escalamos Iñaki y yo hace unos añitos. También decir que el Midi de Bigorré para estas alturas ya se me ha ido presentando poco a poco en la otra dirección durante la subida al collado, y flipo mirando lo escarpado de su cara oeste, y distingo la goulotte de la famosa via de esta cara, que forma un hilillo de nieve-hielo, pareciéndome bastante escaso por cierto. Continúo la ascensión por la cresta hacia la cima, presentando ésta, un estado bastante seco, con partes heladas, y los tramos de nieve parece q asoman mas arriba aunque en pequeña proporción. Tras llegar a los ibones de Montaigú, que se encuentran helados, diviso dos antecimas, viéndose la penúltima sobre todo ya más blanca. Subo hacia esta última, por terreno nevado, y ya llegando a ella, se divisa la pala final a cima, que se encuentra igualmente pelada. 

De vez en cuando al acercarme al filo, miro hacia abajo con idea de interpretar la ruta a la Cara Este, objetivo perseguido desde hace tiempo por Iñaki y por mí, pero la verdad es que no lo veo claro, al no ser una cara muy uniforme, sino muy caótica con diversas posibilidades. Evitando las partes más heladas llego a cima (no me he puesto los crampones en toda la subida) sobre las 10:00 de la mañana. Veo una segunda cima enfrente de una altura muy similar a la que estoy, y aunque creo que estoy en la buena, paso por una cresta estrecha a la otra, sobre todo para ver el itinerario por el que se subiría viniendo de Hautacam. En principio no le veo mucho atractivo. Sí me da la sensación que la via a la Este, su final puede ser el colladito entre las dos cimas, pero es sólo una hipótesis. Me da pena no haberme estudiado antes la descripción de libro de Moussel para interpretarla sobre el terreno, aunque tambien es cierto, que la cara este no se deja ver muy claramente en todo el trayecto, a pesar de estar encima de ella. Las vistas de cima son acojonantes, y eso que creo que solo distingo como mucho un 25% de lo que veo. 

El Midi de Bigorre impresiona, me cuesta interpretar cuál es el Merlheu, a pesar de estar al ladito. Distingo Neovielle, Pic Long, la Norte del Vignemale, con un hilillo de colour de Gaube (para las fechas que son, tendría que haber bastante mas nieve), La Munia, Los Gabizos, Balaitus y alguno más, pero la verdad es que se ven 100.000 más, porque hay una visibilidad total con el parte de meteofrance de “soleil Volei”, nubosidad muy alta dejando asomar la claridad del sol. Para la bajada decido ponerme los crampones e intentar bajar lo mas pegado al filo de la arista, que es lo que está más blanco. Antes de llegar al collado, tras ir un buen tramo con los crampones por piedra y tierra, veo una especie de canal q tira para la pala que subia al collado, y me tiro en picado para no pasar por el collado, y no seguir machacando crampones. Además, la pala es bastante pina, saco el piolo y todo por si acaso. Resto de bajada sin novedad hasta que a las 12:05 estoy ya en el coche, y me da por pensar que qué fuerte esta clase de planes, levantandote a las 4 en Donosti y a las 12 ya has bajado del monte como quien dice. 

La verdad que aunque son 1200 de desnivel, al tener poca nieve, se te hace hasta corto, como que te esperabas más batalla. La zona me ha gustado tanto, que hasta decido irme un poco por ahí de turismo. Asi que bajado a la carretera del valle, he tirado hasta el fondo, a “Le Chiroulet”. Allí controlo la subida al “Lac Bleu” y al “Lac de Peylerade” (me suena de las batallitas de Z del circo de Peylerade), en éste último indica el cartel, “sólo para randonneurs experimentados”. Me doy un paseo por el bosque, y la verdad q me empieza a funcionar la cabeza para subir hacia ahí arriba, tiene una pinta muy buena. Incluso pienso que sería un gran plan subir con tienda al lac Bleu, y al día siguiente hacer el pico Merlheu, o lo que se tercie ... Ya regreso al coche, y me pongo en marcha a Donosti. 

Paro en el área del Tour de France, y me como el salchichón con pan que he llevado, mirando como tonto tirado en una campa toda la línea pirenaica que se ve con una claridad acojonante. Para estar un rato más, me pillo un Yop para bebérmelo viendo el espectáculo, jejeje, qué grandes momentos. La verdad es que nunca me había fijado tanto a lo lejos en el Montaigú como hoy. Al final con pena, vuelta a casa, llegando a las 16h30.

Y ahora a pensar en le próximo finde, que será de esos especiales por el simple hecho de tener la gran suerte de tener alguién con quien ir al monte, encima Iñaki nada más y nada menos". Alberto Fdez.